La pandemia por COVID-19 ha sido un parteaguas, por lo que es importante reforzar la colaboración y la coordinación entre los distintos sectores sociales para responder a los retos públicos que presenta, coincidieron participantes del diálogo “Gobernar después del shock”, realizado por el Consejo Nuevo León para la Planeación Estratégica.
Como parte de la serie de eventos a nivel mundial Government After Shock, convocados por el Observatorio de Innovación en el Sector Público de la Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económicos, representantes de la academia, el Gobierno estatal y municipales, el sector privado y la sociedad civil participaron en reflexionar y reunir aprendizajes ante esta situación.
Ana Fernanda Hierro Barba, directora de Consejo Nuevo León, afirmó que para atender esta nueva realidad se necesita un enfoque de colaboración e innovación que permita una rápida adaptación y poder responder efectivamente.
“El COVID-19 ha retado nuestro sistema gubernamental y social de forma única: ha traído a la superficie problemas estructurales que teníamos de antaño, al tiempo que ha requerido atención inmediata a otros problemas nunca antes vistos.”
Carmen Garza T Junco, directora de Fundación Frisa y líder del movimiento UNIR Y DAR, y Santiago Ocejo Torres, consultor de McKinsey & Company, expusieron varios de los aspectos que han sido afectados en diferentes ámbitos, sobre todo el aumento de las desigualdades entre la población, como el acceso a la salud, a la educación o la brecha digital.
Garza T Junco señaló que se ha tenido que actuar con rapidez y flexibilidad para resolver las problemáticas inmediatas con acciones claras y contundentes, y también ir cambiando las estructuras desde la raíz para solucionar los grandes problemas a largo plazo con base en instrumentos como el Plan Estratégico del Estado.
“El Gobierno es el que tiene más alcance, más cobertura, pero también el que tiene menor flexibilidad; lo he descubierto en estos cinco años como presidenta del Consejo de la Secretaría de Desarrollo Social, la voluntad no es suficiente, se requieren muchísimas más voluntades.”
Ocejo Torres señaló que, a pesar de la responsabilidad y la presión que todavía enfrentan, el Gobierno es el actor que puede asumir un liderazgo y sumar a los diferentes sectores
“Sabíamos desde un inicio que pocos Gobiernos alrededor del mundo no iban a quedar bien parados, a pesar del tiempo de preparación que tuvieron algunos, como el caso de Latinoamérica”.
Agregó que, gracias a encuestas que ha aplicado McKinsey & Co. a nivel nacional, se ha identificado que 60 % de las personas han cambiado sus hábitos de consumo, además de un aumento en el uso de plataformas en línea, lo que ha traído otros riesgos, como una mayor exposición a sabotajes digitales.
Garza T y Ocejo coincidieron en que las autoridades gubernamentales deben ejercer la transparencia, mecanismos de Gobierno abierto y procesos ágiles para responder a las necesidades de la población.
Otros aspectos mencionados fueron la corresponsabilidad, sobre todo de las personas para que tomen las medidas de salud adecuadas y eviten que haya rebrotes, profesionalizar el conocimiento de quienes ya tienen alguna preparación, así como aprovechar la mayor movilización ciudadana para encontrar nuevas y mejores soluciones.
Este ejercicio enriquecerá el análisis para el Plan Estratégico del Estado, actualmente en revisión, de las distintas afectaciones que se prevén por la pandemia en el largo plazo.